Recuerdos de un Misionero Estigmatino

Padre José Bonomi
1940 - 2008
Con mucho pesar me enteré el día 9 de Septiembre de 2008 del fallecimiento del Padre José Bonomi, a quien conocí cuando llegó a Chile e hicimos grandes lazos de amistad.

Recuerdo que el año 1987, después de la visita que nos hizo S.S. Juan Pablo II, “El Grande”, el Párroco de la Parroquia Divino Redentor, Padre Pedro Zappini, viajo a su natal Italia y al despedirse de nosotros, nos pidió a mi y a mi esposa que recibiéramos a un sacerdote Estigmatino Italiano que venia desde Brasil, su nombre José Bonomi.

Fue así como un grupo de amigos, agentes pastorales de la parroquia Divino Redentor, preparamos una recepción en mi casa para darle la bienvenida cuando llego el padre José, desde el primer día que le conocimos nos cautivo con su forma de ser, un sacerdote, misionero, simpático, sencillo, culto, muy locuaz, y con una cantidad de anécdotas y aventuras que podía mantener la atención de todos los concurrentes.

Debo reconocer que cuando lo conocí lo encontré parecido al Quijote de la Mancha y con el tiempo que compartí con él me di cuenta que nos enseño a tener un sueño imposible, porque “Con fe lo imposible es soñar” ahora puedo afirmar que él tenía mucho del personaje de Cervantes.

Desde su arribo a la Parroquia demostró ser un trabajador incansable, se puso a trabajar, en su actividad Ministerial, primero dándose el tiempo de conocer a cada persona y preocupándose de todos los agentes pastorales, respetando la forma como hacíamos nuestro trabajo, no recuerdo que él hubiera impuesto alguna gestión, por lo que muy pronto se gano el cariño y aprecio de todos.

También fue un gran constructor, de inmediato entusiasmo a muchos para que le ayudaran en arreglos y remodelaciones en nuestra parroquia, al poco tiempo consiguió recursos económicos en Europa, Italia y Alemania y en una superficie desocupada del Parque del Perdón, construyo un pabellón de dos pisos donde se instalaron diez salas, para mejorar la infraestructura parroquial y permitir una mejor entrega de las catequesis.

Al Templo le faltaba la terminación de su fachada, fue así como inicio los trabajos para construir el atrio, mejorar la iluminación, remodelar el presbiterio, y la sacristía, en este trabajo recuerdo una anécdota, antes de terminar esta construcción le falto plata y entiendo que vendió un auto de la Congregación Estigmatina para obtener el dinero que necesitaba. En otra oportunidad tubo que sacar carnet de identidad y al momento de tomar su impresión digital tuvieron que repetir varias veces ya que el uso excesivo de sus manos le había borrado en parte las huellas digitales.

Una cualidad muy destacada en él fue su disposición de servicio, nunca se molestó ni demostró cansancio cuando alguien le pedía, que visitara algún enfermo, o alguien en problemas, con una caridad a toda prueba se podía desprender de su chaleco para regalárselo a quien lo necesitara y con una alegría digna de imitar.

En lo personal el padre Bonomi, junto al padre José Ovidio, nos acompañaron en los momentos mas difíciles que nos ha tocado vivir con mi familia, el 11 de Abril de 1988, falleció a consecuencia de un accidente automovilístico, nuestro querido hijo José Luis, un niño de 11 años de edad, amante de la vida, con una cantidad enorme de cualidades, donde cualquiera es capaz de preguntarse ¿Por qué Dios permitió que pasara esto? Sin embargo a pesar de todo nuestro dolor agradecemos al padre Bonomi toda su entrega y su ayuda para con nosotros que logramos ponernos nuevamente de pie y descubrir que existían muchas razones para seguir viviendo.

El Padre Bonomi fue un misionero fiel al Evangelio de Jesús, capaz de entusiasmar a cualquier persona, yo fui testigo que cumplió con la misión encomendada, por eso tengo la certeza y la alegría que mi amigo José Bonomi se encuentra resucitado en la morada del Señor.

La figura del Padre Bonomi, dentro de la Parroquia fue fundamental en el periodo que estuvo con nosotros, él fue el motor que impulsó, el pastor que guía, el padre espiritual que aconseja, el mantuvo el contacto diario con los fieles y tuvo la misión pastoral de enseñar, santificar y gobernar al Pueblo de Dios. El fue el ministro de la Eucaristía, el dispensador de la misericordia divina en el Sacramento de la Penitencia, el consolador de las personas, el guía de todos los fieles en las dificultades de la vida, el fue el que prolonga la presencia de Cristo Jesús, único y supremo Buen Pastor, siguiendo su estilo de vida de entrega y de amor por la humanidad.

Todas estas virtudes y tal vez muchas más, que no alcanzamos a conocer, hemos descubierto en vuestra persona querido Padre Bonomi, sabemos que no siempre la tarea fue fácil, pero en las dificultades es donde se templa nuestro carácter, aprendimos a caminar juntos y a evangelizar a nuestros hermanos, a hacer de nuestra Comunidad una comunidad de verdaderos hijos de Dios.

Agradezco a Dios haberle conocido y compartido con el padre Bonomi, y como un pequeño homenaje póstumo les comparto la letra de la canción Un Sueño Imposible y esta pequeña reflexión

La vida me ha enseñado que Dios quiere que seamos felices, pero esta felicidad depende de nosotros y la felicidad son instantes que se deben aprovechar al máximo

Que maravillosa sincronía entre el Quijote y lo que Dios quiere de nosotros

Al leer la letra de la canción, me di cuenta que El Quijote luchó por alcanzar su estrella frente a todo lo que se le pusiera enfrente, aquellos dragones disfrazados de molinos y tantos otros desafíos, pienso que a veces, nos dejamos abatir por pequeños problemitas y nos negamos a luchar y a dar la pelea.

Es cierto que hay veces en los cuales los molinos son demasiado grandes y que muchas veces el camino es de subida y que tampoco es como yo creía pero creo que si lucho como el Quijote, creo que lograre alcanzar mi estrella, esa que me hará mirar satisfecho el camino ya recorrido y con la cual lograre mi ideal.

Grande José Bonomi, estas son las personas que admiro, los que no importando nada son capaces de luchar por lo que creen y por lo que aman.

Como hizo Don Quijote, hay que luchar para conseguir que nuestros sueños no sean imposibles de alcanzar.

Deseamos expresar nuestras mas sentidas condolencias a toda la familia Estigmatina que el Señor los bendiga y nuestra Madre María los proteja y los acompañe.

Desde Santiago de Chile, toda nuestra gratitud por la entrega generosa y desinteresada de nuestro amigo el Primo José Bonomi Q.E.P.D.


Homero Guzmán Navia, Mónica Liberona Cortes y Familia


UN SUEÑO IMPOSIBLE

El hombre de la Mancha
Con fe, lo imposible soñar, al mal combatir sin temor
triunfar sobre el miedo invencible, en pie soportar el dolor.

Amar la pureza sin par, buscar la verdad del error
vivir con los brazos abiertos, creer en un mundo mejor.

Es mi ideal
la estrella alcanzar no importa cuan lejos
se pueda encontrar luchar por el bien
sin dudar ni temer y dispuesto el infierno arrastrar
si lo ordena el deber.

Y yo sé que si logro ser fiel con mi sueño ideal
estará mi alma en paz al llegar de su vida el final.

Y será este mundo mejor si hubo quien despreciando el dolor
combatió hasta el último aliento.

Con fe a la estrella alcanzar
Elevemos nuestras plegarias a Dios con el ángelus que es una oración mariana y cristológica centrada en la meditación del misterio de la Encarnación.
EL ÁNGELUS

V. El Ángel del Señor anunció a María
R. Y concibió por obra del Espíritu Santo
Dios te salve, María... Santa María...

V. He aquí la esclava del Señor
R. Hágase en mí según tu palabra
Dios te salve, María... Santa María...

V. Y el Verbo se hizo carne
R. Y habitó entre nosotrosDios te salve, María... Santa María...
V. Ruega por nosotros, santa Madre de Dios
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo

V. Oremos:

Derrama, Señor, tu gracia en nuestros corazones para que cuantos por el anuncio del Ángel, hemos conocido la Encarnación de tu Hijo Jesucristo, por su Pasión y su Cruz, lleguemos a la gloria de la Resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor.

R. Amén

POR LAS BENDITAS ALMAS DEL PURGATORIO
Roguemos por el Padre José Bonomi
Padre nuestro… y Ave María…

V. Dales, Señor el descanso eterno
R. Y brille para ellas la luz de la eterna gloria

V. Descansen en paz
R. Amén

V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo
R. Como era en el principio ahora y siempre, por los siglos de los siglos Amén
(tres veces)